Mesa 2 viernes 8 09:30h Contratación Pública Tiempo estimado 120’ |
OBJETIVOS DE ANÁLISIS
– Precios bajos: ¿Que dato objetivo se maneja para obtener el precio base? Los mínimos colegiales se han convertido en máximos y esto ha generado precariedad laboral, escasos salarios, exceso de becarios, falsos autónomos, piratería informática y escasez de medios. ¿Compensa tanta miseria el ahorro obtenido?
– No discriminación a los pequeños estudios: Los políticos hablan siempre de apoyar a la pequeña empresa y a los autónomos. Pero los lejos de esto, los concursos se llenan de condiciones que difícilmente pueden cumplir los pequeños. Se considera por defecto más solvente a una gran empresa que a un pequeño estudio solo por su tamaño. ¿No son los grandes estudios responsables de grandes pifias?
– Evitar la concentración de encargos: La contratación pública no debe ser patrimonio de unos pocos. La condición de haber hecho obras similares parece más una fórmula para mantener una casta, más que garantizar un buen servicio. ¿Acaso para presentarse a Presidente de gobierno se exige haber sido presidente al menos de tres naciones similares en los últimos cinco años?
– Sostenibilidad: Los concursos en una sola etapa fomentan la participación abierta a todos, pero también generan empobrecimiento colectivo. A nivel de economía de país lo que se obtiene es una caída brutal de la productividad. Ingresos/horas. Si 100 estudios dedican una media de 3 personas y un mes a un concurso de 50.000 euros de honorarios, obtenemos que solo para llegar a contratar, se han consumido (100*3*22*8) horas = 52800 horas. Tras hacer uno de ellos el proyecto y la dirección se consumen otras +-1000h. El resultado es que en España el sector de arquitectos en obra pública genera 92 céntimos de euro por hora trabajada, lo que queda muy por debajo del umbral de la pobreza. Es económicamente insostenible. ¿Existe algún sistema de selección que tenga en cuenta diferentes criterios de acceso: jóvenes y recién titulados, especialistas, económicos, currículum… con un número sostenible de licitadores.
– Responsabilidad e indefensión: La responsabilidad según la LOE es personal, pero a las licitaciones acuden empresas que ponen como técnicos responsables a miembros de su plantilla. ¿Como puede contratar una empresa una dirección de obra o un proyecto y delegar la responsabilidad en un empleado? Cuando el contrato incluye más conceptos se puede entender, pero cuando todo el contrato se circunscribe a la actuación de una persona física que responde personalmente la intervención de la empresa se parece más a la figura de un intermediario o conseguidor que se lleva una comisión sin aportar valor al servicio. La experiencia ha demostrado que cuando surgen problemas el técnico está solo y la empresa desaparece. Falta regulación en este asunto.
– Jurados de calidad: Los jurados multidisciplinares son sensatos, pero cada jurado debe valorar su disciplina concreta con la mayor objetividad posible. No tiene sentido que un jurado se componga mayoritariamente de personas ajenas a la disciplina y que todas opinen de todo. ¿Cuál sería el número máximo de arquitectos que se admiten en las oposiciones a judicatura?
– Transparencia: La contratación pública es bastante opaca. Los resultados de las valoraciones técnicas deben abrirse y hacerse públicos antes de abrir las plicas económicas, pero esto rara vez se cumple. Proponemos un concurso en dos fases: Una fase de valoración técnica, donde se publican en web las valoraciones técnicas motivadas y posteriormente los licitadores presentan los sobres con la oferta económica. Un licitador con baja puntuación técnica puede compensar con una baja mayor y otro con una alta valoración técnica puede decidir no bajar. Prestigia al licitador y a la institución y evita manipulaciones en la oferta económica.
PONENTES
– ACE-CAE. Consejo de Arquitectos de Europa-
– Representante de la Administración local -Secretaría Ayuntamiento Alcorcón Gloria Rodríguez Marcos,
– Representante de la Administración autonómica – Jefe de Servicio de Proyectos de la consejería de educación de la Junta de Castilla la Mancha Fernando Pérez Gonzáez (pendiente de confirmación)– Representante de la Administración del Estado. – Subdirector de Arquitectura Ministerio de Fomento Javier Martín Ramiro
– Javier Fresneda, arquitecto miembro del estudio MTM Arquitectos, equipo con gran experiencia en la realización de concursos de arquitectura.
– Estudio dedicado a concursos – DJ Arquitectura
Se adjudican los concursos actualmente a estudios con bajas temerarias en los honorariuos prescindiendo de la calidad técnica del resto de los concursantes y con informes desfavorables de los jurados .
En demasiadas ocasiones estas adjudicacionbes producen una bajada de la calidad de la ejecución de la obra debido a que la diferencia de honorarios suelen quedar compensados por cambios en las calidades de las unidades de obra.
Si realmente esta es la situación y si seguimos el aforismo de que la causa de la causa es causa de lo causado, podemos concluir que es la propia administración la que mal-administra la gestión de la obra pública por medio de concursos imposibles.
Es fundamental poner en valor trabajo y esfuerzo, y no tanto los medios materiales, la experiencia o el precio del servicio.
Es decir, la administración debe valorar el TALENTO (el proyecto, el servicio dado). La experiencia genera recurrencia, cuanta más experiencia tengo, más fácil es acumular más, lo mismo que los medios, cuantos más encargos, más medios, luego más encargos. Esto suele derivar en corralitos.
Un proyecto es una labor intelectual y no requiere de un gran esfuerzo físico: El pensar es como correr. Mil caballos percherones no alcanzarán nunca a un pura sangre de carreras.
No es cierto que haber realizado previamente proyectos similares signifique el éxito en un nuevo encargo, tampoco lo es el tener muchos medios a tu disposición. Los grandes avances desde siempre han salido de equipos pequeños, con condiciones mínimas. Gente joven con ilusión y talento son los que han sacado adelante los grandes proyectos. Gente que cuando se han organizado en grandes empresas con mucha más experiencia, se han vuelto mucho menos creativos y han perdido gran parte de su liderazgo en favor de otros más jóvenes y con menos experiencia.